En la familia de las garrapatas están los ácaros. Ellos se alimentan de la sangre y también son capaces de transmitir enfermedades.
Es
normal encontrarlos en reptiles y deben buscarse en cualquier examen físico.
Las tortugas, al ser un reptil, se alojan en ellas. Los ácaros no pueden
infectar a otros animales ni a las personas, pero ellas han logrado desarrollar
la habilidad de utilizar a las tortugas como medio de transporte. Por ello,
cuando se acuda a una tienda en donde se vendan reptiles, se corre el riesgo de
traer contigo ácaros.
Los ácaros se mueven constantemente sobre la piel del
animal, también pueden encontrarse libres en el ambiente. Cuando se trata de
infestaciones graves, el excremento de los ácaros aparece en forma de polvo de
tiza sobre el caparazón del animal. El ácaro más cotidiano es Ophionyssus
natrícus, que puede ser de color rojo, negro o gris y mide aproximadamente 1 mm
de largo.
Aquellos reptiles que son capturados de la naturaleza tienen
ácaros, sin embargo, no representan un problema al estar en su medio natural,
puesto que al mudar la piel se liberan de ellos, todo lo contrario sucede
cuando el animal está en cautiverio, puesto que al estar en estrés constante,
afecta su salud, sobre todo sus defensas, puesto que, se ven obligados a
permanecer en el mismo ambiente donde queda su piel y donde los ácaros se
reproducen por miles, puesto que es un sitio con condiciones favorable para la
misma.
Estos ácaros ocasionan irritación, es por eso que las
tortugas permanecen sumergidas en el agua durante un largo tiempo. Los ácaros
pueden verse en el agua de la bañera, andando por el terrario o sobre el
animal, éstos constituyen un problema serio, ya que además de la irritación
local y pérdida de sangre, actúan como vectores de varias enfermedades
infecciosas, siendo la más importante la causada por Aeromona hydrophila, el
cual, es un germen que produce neumonía, septicemia hemorrágica y muerte en los
reptiles, así como dermatitis en el hombre.
Una forma de tratarlos es sumergiéndolos en agua durante un
lapso de 24 a 48 horas para aliviarlos. Posteriormente, se desinfectara el
territorio a fondo con una solución de formalina. También es conveniente
renovar el sustrato y usar papel de periódico.
Recuperado de: http://www.udla.edu.co/revistas/index.php/ciencias-agropecuarias/article/view/453
Recuperado de: http://www.udla.edu.co/revistas/index.php/ciencias-agropecuarias/article/view/453
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